Desde que inició la pandemia, y sobre todo desde que la región de las Américas se convirtió en epicentro de esta; la Venezuela bloqueada económica, financiera y comercialmente por EEUU, su sistema público de salud, y las medidas adoptadas por el Gobierno de Nicolás Maduro, resisten los embates del COVID-19.
El indiscutible éxito de la contención del COVID-19 en Venezuela
Ya en septiembre, era indiscutible el éxito de la contención. En octubre, y ante la ola de anuncios desde varios países de las Américas, por la carrera para el desarrollo y la producción de diferentes vacunas contra el COVID-19, con el fin de tenerla disponible para sus poblaciones; Venezuela sin mucho alarde, recibía la vacuna Sputnik V, en una acción concreta, que convertía al país, en el primero de toda la región, en obtener las primeras dosis para ensayos clínicos, correspondiente a la fase 3 de los mismos, en la cual participan 2.000 personas en suelo venezolano.

Aún no llega noviembre, y Venezuela no deja de ser noticia con relación al COVID-19, afortunadamente, no del colapso, el caos y las muertes que se esperaban fuera problema para toda la región.


Y es que, mientras se sigue demostrando que las políticas sanitarias aplicadas por la Revolución Bolivariana, para la contención de la pandemia, han sido completamente acertadas; también se ha puesto la ciencia y la tecnología venezolana, a disposición de la humanidad.

El IVIC y la molécula DR10
Es así como, mediante el estudio de una planta con propiedades medicinales, analizada químicamente por un grupo de investigadores del Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC), monitoreando su actividad biológica en células infectadas con virus SARS-CoV-2 aislado de pacientes venezolanos, de los mismos secuenciados en el país; se logró identificar el principio activo o estructura química de una molécula derivada del Ácido ursólico, presentando 100 % de inhibición de la replicación del virus in vitro, y sin mostrar toxicidad en las dosis en las que fue enfrentada en presencia del virus, en células sanas.
A la fecha se cuenta, con el estudio químico, molecular, resonancia magnética nuclear (RMN), carbones y protones, que muestran la identificación de la estructura completa de la molécula, así como de todos los estudios estadísticos en virología; por consiguiente se tiene aislada, soportada en el informe físico químico y de actividad biológica con la atribución de 100% inhibidora del virus SARS-CoV-2, contando con el aval de IVIC, y a disposición del cuerpo científico del país y de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para iniciar las siguientes actividades. Toda una novedad, increíble en el mundo, pero cierta. En Venezuela, se pudiera tener una cura al nuevo coronavirus, denominada DR10.
El COVID-19 en Venezuela, países de las Américas y el mundo.
Coronavirus que hace y ha hecho estragos sobre las poblaciones de varios países de América Latina, reflejo de la aplicación de las políticas neoliberales implementadas durante años; y aunque Europa vuelve a ser epicentro de la pandemia; siguen estando entre los primeros 10 lugares Brasil, Argentina, Colombia y México; sin embargo, el virus ya esparció sin clemencia destrozos sobre los pueblos de Perú, Chile, Bolivia, Ecuador.

Por otra parte, no debe asombrar enhorabuena la noticia sobre la molécula DR10, pues no es el único esfuerzo que se ha hecho en Venezuela. Es que, en el país, más allá de los pronósticos, apenas se superan los 90.000 contagios totales; mientras que Brasil, rebasa los 5.400.000 de casos, seguido por Argentina y México, donde se han contagiado más de 1.100.000 y más de 890.000 personas, respectivamente.

Así mismo, mientras que en Venezuela los casos de contagios por millón de habitantes alcanzan un poco más de 3.100 personas; en Panamá superan los 29.900 casos (país de la región con más contagios por millón de habitantes), seguido de Perú y Chile con más de 26.000, así como Brasil con más de 25.400 casos. En tanto, Argentina y Colombia, ya superaron los 24.300 y 20.000 casos.

Si es en cantidad de fallecidos, mientras que en Venezuela se suman más de 770 muertes totales, en Brasil se superan las 157.000; seguido de México con más de 89.000; casi 34.000 en Perú; más de 30.000 en Colombia; más de 29.300 en Argentina; y en Chile, Ecuador y Bolivia, totalizan más de 14.000, 12.500 y 8.600, respectivamente.

Además, si se mide en muertes por millón de habitantes, mientras en Venezuela alcanzó las 27 personas; en Perú superó los 1030 casos; seguido por Brasil y Bolivia, igualados exactamente con 739 casos, superando por poco a Chile con 732. Ecuador supera los 700 fallecimientos. México se posicionó en 689 casos; Argentina en 646; cuando Colombia, supera los 590.

Por eso, seguimos diciendo, que aun cuando en Venezuela, están afectadas las condiciones materiales, a la que estaba acostumbrada la población, no se puede negar que, en la Revolución Bolivariana, se hace un esfuerzo mayor, superior para garantizar lo más supremo de este mundo, la vida, sobre todo, en estos tiempos de bloqueo y pandemia.
Debe estar conectado para enviar un comentario.