El reacomodo de los principales actores del sistema internacional buscando controlar el suministro de alimentos en medio de la competencia mundial por los recursos naturales, decidiendo que se comerá en el planeta, y a la vez, garantizando la seguridad alimentaria para sus poblaciones, mientras transitan su camino hacia una supuesta e inmediata transición verde, sin perder su estatus de poder, al mismo tiempo que el mundo avanza hacia lo que se ha denominado la ‘Tripolaridad’ y de seguro, marcará el contexto de las futuras cumbres de alimentación.